Encontramos plástico en cualquier lugar: en la comida, en los productos de higiene y limpieza, en vehículos, ordenadores, bolsas, pajitas…
Sin embargo el plástico tiene una vida útil de unos 12 a 15 minutos ya que más de la mitad del plástico que empleamos es de un solo uso, como es el caso de los envases de comida y bebida principalmente.
Una vida útil muy corta para los centenares de años que tarda en descomponerse.
Si bien es cierto que afortunadamente la mayor parte de los plásticos son reciclables, son en realidad downcycled, es decir, solo se pueden reciclar en un producto de menor calidad, nunca en el mismo. Esto va en contra de la filosofía Zero Waste y la economía circular.
Además que sean reciclables no asegura nada porque la mayoría acaban en playas, ríos, océanos y vertederos, de hecho por ejemplo en la revista Science Magazine mostraron que hasta 2015 se habían generado 6300 millones de toneladas de residuos plásticos, y de esta cantidad solo se recicló en torno al 9% y el 12% fue incinerado.
A este ritmo en 2050 habrá 12.000 millones de toneladas de residuos plásticos contaminando nuestro planeta.
Evitar el plástico es complicado, pero no es imposible, por eso os aportamos nuestro granito de arena con una serie de consejos para reducir el uso del plástico en nuestro día a día.
Consejos para reducir al máximo el uso de plástico
Usando productos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente podemos conseguir reducir el plástico y como consumidores tenemos el poder y el deber de presionar a los fabricantes para que reduzcan al máximo o eliminen por completo, los productos de plástico.
- Usar botellas de agua reutilizables, como las botellas de acero inoxidable.
- No comprar pajitas de plástico.
- Hacer la compra con bolsas de papel o de tela.
- Optar por productos sin envase, ya que todavía mejor que reciclar es no generar residuos. Comprar a granel. ¡Hacer tus propios zumos de fruta! Son más saludables y se evitan los envases.
- Comprar productos de limpieza e higiene sin envases plásticos.
- Comprar productos eco friendly.
- Evitar comprar productos que no se necesiten realmente, ejerciendo un consumo responsable.
- Reducir el café en cápsulas.
- Evitar los chicles ya que contienen plástico en su composición, comprando cicles ecológicos.
- Usar cerillas, ya que los mecheros y los encendedores de la cocina están hechos de plástico y son difíciles de reciclar. Las cerillas son biodegradables y muy económicas.
- Emplear utensilios de cocina de madera o de acero inoxidable.
- Evitar las cuchillas de afeitar desechables.
¿Te apuntas al reto de reducir el consumo de plástico?